Con el carácter no se nace, lo formamos viviendo. Pero el temperamento viene con nosotros y nos hace propensos a pensar / sentir / actuar de ciertas formas.
Sin embargo, no pocos confunden temperamento con carácter.
Y un temperamento desconocido nos juega malas pasadas.
No es que conozcamos nuestro temperamento para autojustificarnos ni para resignarnos. Conocerlo nos libera de su "tiranía", porque ya conocemos hacia qué tipo de reacciones tendemos, cuáles son nuestros posibles aspectos favorables y nuestros posibles aspectos débiles, y -especialmente- cómo nos conviene autoeducarnos.
Vale la pena buscar un análísis del temperamento.
2 comentarios:
Si uno busca en el diccionario de la real academia dice que tanto carácter como temperamento son sinónimos.
Pero uno puede entender que el carácter son las cualidades que uno ha obtenido con el transcurso de la vida y el temperamento vendría a ser como la personalidad que es con la que uno nace.
Estimado Anónimo,
No me llegó el aviso de su Comentario, recién lo veo.
Para muchos, temperamento y carácter son lo mismo.
Pero no, con el temperamento se nace. El carácter se trabaja día a día.
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